El diálogo y la gestión social con las comunidades alto andinas, es un factor estratégico de suma importancia, para garantizar en óptimas condiciones, el desarrollo de la industria minera. Sector de trascendencia económica, que contribuye con más del 10% del Producto Bruto Interno(PBI) y el 58% del total de las exportaciones que genera el país. Evitando malos entendidos, enfrentamientos inútiles y paralizaciones innecesarias, que afectan gravemente el normal desarrollo de la producción, de los proyectos mineros; atentándose significativamente contra el crecimiento económico sostenido del Perú.

En tal sentido, las empresas mineras, que desarrollan proyectos de explotación y exploración, tienen la necesidad -a través de sus áreas especializadas de Relaciones Comunitarias y Responsabilidad Social- de promover, de manera permanente, el diálogo efectivo, con las poblaciones comunales de influencia; creando un ambiente de relaciones armónicas de entendimiento, en medio de una convivencia pacífica duradera. Garantizando de tal manera la producción, de búsqueda y explotación de minerales, durante el periodo que dura el desarrollo del proyecto, que muchas veces supera una década. Ya que los resultados de esta actividad económica no son inmediatos, sino a mediano y largo plazo.

PROMOVER EL DIÁLOGO

Sin embargo, sostenemos con preocupación, que este factor estratégico, en el quehacer minero nacional -de diálogo y gestión social con las comunidades-, se encuentra muy descuidado, desde hace varios años; como una práctica constante y permanentemente olvidada, salvo raras excepciones. Solo es utilizada cuando se presentan los conflictos sociales. Siendo obligados a conversar, en medio de la adversidad colapsada, para superar el enfrentamiento y el bloqueo de la producción. A partir de presentado el estallido social, recién se toma conciencia, sobre la necesidad de dialogar, ya que sabemos a ciencia cierta que, utilizando la fuerza, el problema empeora, causando mayores trastornos sociales, promovidos por la violencia. No habiéndose anticipado, medidas preventivas, para que este estado de enfrentamientos no ocurra.

En ese orden de ideas, creemos, necesario y urgente se promueva, por parte de las empresas privadas, que invierten en el sector minero, y el Estado, el diálogo permanente con las comunidades, donde se desarrollan proyectos de exploración y explotación de minerales. Como una forma saludable de alcanzar acertadamente un entendimiento oportuno entre las partes; anticipándose y previniendo futuros enfrentamientos, en el que todos saldrían perdiendo.

ESTADO Y EMPRESA

Asumir este reto que se nos presenta en el presente -si queremos aprovechar el boom de la demanda y los altos precios de los minerales en el mercado mundial- de generar buenas relaciones sociales con las comunidades en la industria minera, en el país, no debe ser una tarea solo de las empresas mineras, que exploran y explotan los minerales en las altas cordilleras; sino, también, es responsabilidad del Estado, promotor y patrocinador, a través del gobierno de turno, de la inversión privada; quien debe garantizar el normal y pacífico desarrollo del quehacer económico. Dentro del marco normativo constitucional, al amparo del Estado de Derecho, en una sociedad de economía abierta, de libre mercado y democrática, que vela por la defensa de la libertad individual y la propiedad privada.

Por otra parte, hay que tener en consideración -para entender con mayor amplitud y precisión el problema- que las comunidades alto andinas, que se dedican a la agricultura y la ganadería principalmente, están siendo en estos últimos tiempos, muy desconfiadas de la inversión privada minera en sus jurisdicciones. Debido a que no sienten de manera real los beneficios de la rentabilidad económica que genera esta actividad extractiva, creándose un ánimo de rechazo, por un mal entendimiento; que muchas veces es alentado por antimineros, que se dedican a promover el enfrentamiento entre peruanos, generando el caos.

Asimismo, esto se ve incrementado, ante la falta de información oportuna a las comunidades, sobre la forma como se va a llevar a cabo el desarrollo del proyecto minero en sus territorios. Ya que imaginan que se producirá una contaminación ambiental que afectará su supervivencia. Esto los pone en alerta roja, generando una animadversión al quehacer minero. Sin darse cuenta de las bondades que traen estas inversiones privadas, que les permitirán elevar la calidad y nivel de vida, generando progreso y desarrollo en los pueblos.

POLÍTICA EMPRESARIAL INCLUSIVA

Por tal motivo, es muy conveniente desde el inicio de la implementación del proyecto hablar claro, con la comunidad y sus dirigentes, a través de una comunicación directa y un diálogo transparente. Sincero y abierto. Para generarles confianza. Explicándoles la rentabilidad y los riegos del negocio. Haciéndolos participes de los beneficios económicos que se obtengan, a través de la extracción y comercialización de los minerales explotados. Reconociendo -a las comunidades- como aliados estratégicos en esta aventura empresarial. Siendo esto parte del desarrollo de una política empresarial inclusiva, de amplia participación colectiva.

Por otro lado, es sumamente conveniente darles a conocer los Estudios de Impacto Ambiental (EIA) -aprobados por los órganos fiscalizadores competentes- que es su principal preocupación. Ya que temen que sus ríos sean contaminados, sus animales envenenados y su salud quebrantada. Explicándoles que se mitigará al máximo el impacto ambiental -en caso lo hubiera- con el uso de tecnologías avanzadas, de punta, que se utiliza en los tiempos modernos globales con el avance tecnológico. Reconociendo, asimismo, que serán supervisados y fiscalizados en todo su proceder del desarrollo del proyecto, por instituciones especializadas, del Estado Peruano. Y se regirán, de manera respetuosa, por las leyes que gobiernan el Estado de Derecho. Sometiéndose a las instancias jurisdiccionales que correspondan, en caso sea necesario. Actuando de tal forma se irá ganando la confianza de la población.

DESARROLLAR LA CONFIANZA

Es necesario remarcar que el diálogo con las comunidades debe darse desde el inicio, de manera permanente. Instalando mesas de diálogo. A través de las cuales se tomarán acuerdos y compromisos que serán suscritos en actas correspondientes. Para luego, hacerle el seguimiento adecuado para su cumplimiento. Desarrollando una relación armoniosa de respeto mutuo. Esto redundará indubitablemente en el reforzamiento de la confianza. Generando una alianza sólida y de largo plazo.

Por otro lado, ayuda mucho a una empresa minera, a consolidar su relación con las comunidades de influencia, cuando ven que esta se interesa por el bienestar de la población, apoyando con programas sociales de atención a la salud y la educación, principalmente; así como el mejoramiento de su infraestructura. Esto debe realizarse, buscando la participación del Estado, a través de sus autoridades locales, regionales y nacionales. Que son las responsables del desarrollo de los proyectos de Inversión Pública.

Un buen Plan de Relaciones comunitarias debe identificar, entender, manejar los principales aspectos sociales relacionados con las operaciones de la empresa. Para maximizar los impactos positivos y mitigar los impactos adversos que se puedan generar.

Siendo los objetivos centrales de las Relaciones Comunitarias que desarrolla una empresa:

I. Identificar a los actores sociales.

II. Determinar sus intereses específicos.

III. Definir estrategias y actividades que favorezcan el consentimiento o Licencia Social.

PREVENIR EL CONFLICTO

El objetivo central del diálogo permanente es prevenir el conflicto. Evitar que este se presente, en una actitud de responsabilidad preventiva. Cuando este es inevitable, y rompe todas las vallas de contención, es necesario mantener la calma. Manejando el conflicto con prudencia, con una negociación racional, evitando que escale, y se vuelva inmanejable. Siendo la Licencia Social imprescindible. Actuando de tal manera con seguridad en el desarrollo del Proyecto de Inversión. En caso contrario esto se vuelve inadmisible.

Hay que tener siempre en consideración, en primera línea, que una comunicación deficiente con las comunidades desencadenará inevitablemente en un conflicto. Por eso es sumamente importante, tener a cargo de esta responsabilidad a profesionales de la comunicación. Expertos en el manejo del diálogo.

En este aspecto, de desarrollo de diálogo con las comunidades, y la implementación de programas sociales con las poblaciones de arraigo minero, hay algunas prácticas que se vienen realizando, con resultados positivos, que es necesario tenerlos como referentes. Siendo el más consolidado el trabajo realizado por Quellaveco, en la región de Moquegua en el sur del país.

“MAS ALLÁ DE LA EXTRACCION”

Quellaveco es una mina de cobre, a tajo abierto. Ubicado en una zona volcánica, por lo que su nombre en aymara significa “Lugar de cenizas”. Nace 100% digital y representa la mayor inversión minera en el Perú, con un proyecto que sobrepasa los 5 mil millones de dólares de inversión. Con un horizonte de producción de vida útil de 36 años. Esperando producir un promedio de 300 mil toneladas de cobre anualmente en sus primeros diez años de operación, a un costo de $ 1.05 por libra de cobre. Calculándose las reservas minerales estimadas alrededor de 1,300 millones de toneladas. Asimismo, la mina producirá molibdeno y plata, como subproductos.

Quellaveco inició su programa: “Mas Allá de la Extracción: Oportunidades Económicas en Comunidades mineras” en el 2017. Donde desarrolló una relación efectiva de Responsabilidad Social con la población moqueguana. Implementándolo a través de un Convenio de inversión Tripartito: Público-Privado. Donde participó:

 AngloAmerican. Empresa minera que desarrolla el Proyecto Quellaveco, en sociedad con la Corporacion Mitsubishi.

 Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

 Technoserve. Organización internacional No Gubernamental. Sin fines de lucro.

El apoyo que recibe de la comunidad de Moquegua, fue el resultado de una innovadora consulta de 18 meses de intenso trabajo con autoridades y representantes de la sociedad civil, a través de la instalación de una mesa de diálogo. Donde se acordó 26 compromisos detallados y específicos relacionados con la gestión del agua, la protección del medio ambiente y la inversión social. Asegurando que el proyecto no tomará agua reservada para la población y la agricultura de Moquegua. Anunciando, que el agua requerida por la operación provendrá del rio Titire, cuyas aguas son de origen volcánico, por tanto, inadecuadas para uso humano o agrícola, usándose adicionalmente agua de excesos de lluvia recolectada en la presa Vizcachas, que será construida por la empresa, que además servirá para entregar agua de mejor calidad a la población.

Este programa social de trabajo con la población, que se inició en el 2017, se prolongó hasta el 2020. Logrando en esta primera etapa de trabajo comunitario en Moquegua promover 1007 empleos. Y un aumento del 36% en las ventas de 402 empresas involucradas. Con un criterio sólido de darle sostenibilidad a las pequeñas organizaciones empresariales en el tiempo.

Con un método innovador de re imaginar la minería para mejorar la calidad de vida de las personas, empezaron a trabajar con las comunidades campesinas. Fortaleciendo las capacidades y promoviendo el desarrollo. Se creó el Programa Agro Quellaveco, con el propósito de generar líneas de crédito para los agricultores, contando para ello con la participación de la Cooperativa de Ahorro y Crédito Santa Catalina. Entidad que logró entregar hasta el 2022 más de 270 créditos a productores agropecuarios desde su lanzamiento en julio del 2020. El programa financiero de otorgar préstamos a los agricultores, se inició con un fondo de 5 millones de soles. Producto de un aporte directo de la empresa AngloAmerican.

Debido a los pagos puntuales de los beneficiarios, hasta el 2022, se ha llegado a prestar 13 millones de soles, lo que equivale al 160% de crecimiento del fondo.

Inicialmente, los créditos iban de 3 mil a 90 mil soles. Según la necesidad del solicitante. La morosidad es ínfima, calculándose en 1%.

“MOQUEGUA EMERGE”

Con el propósito de buscar un desarrollo económico inclusivo y sostenible dentro del área de influencia de Quellaveco, atendiendo principalmente, con mayor profesionalismo, los problemas de empleo y desarrollo empresarial de la región, se inicia “Mas allá de la Extracción II”, a través del programa local “Moquegua Emerge”, el año 2021. Con un presupuesto de 2 millones 150 mil dólares. Haciendo previamente un certero diagnóstico de la realidad socio-económica de la región, a través de un proceso participativo de la población.

Se empezó a dar trabajo a 35 empresas, (que fueron seleccionadas previa calificación) como proveedoras del corredor minero del sur, durante 10 meses. Brindándoles asesoría personalizada a cada empresa, de manera integral. Es decir, administrativa, financiera y comercial. Para lograr hacerlas rentables y sostenibles.

Se ayudó a dar fortaleza a las instituciones públicas y civiles, con un criterio inclusivo. Para lograr supervisar las inversiones, alcanzando optima fiscalización.

Asimismo, a través de la elaboración de una Hoja de Ruta, se buscó fortalecer las oportunidades de empleo para los jóvenes, promoviendo un enfoque integral y sostenible que beneficie a toda la región, denominándose: “Hoja de Ruta Multiactor para la Empleabilidad Juvenil en la Región”. Se implementó dentro del ecosistema laboral.

Se crearon talleres de “Perfil Profesional” y “CV de alto Impacto”. Considerándose herramientas neurálgicas y trascendentes para lograr la inserción laboral. Así como la promoción de “Tips para tu primer empleo”.

A través de los Desayunos Empresariales, se promovía conversatorios sobre “Liderazgo y negociación Efectiva”. Con el objetivo que cada participante mejore sus habilidades y técnicas de comunicación efectiva para sus procesos de negociación.

Dentro de esta miscelánea de actividades que promovían el desarrollo social y económico de la población, se desarrolló prácticas de oratoria y expresión oral efectiva. Hubo orientación vocacional y promoción de becas.

CORREDOR MINERO DEL SUR

Otro referente significativo a tener en consideración sobre la práctica de buenas relaciones con las comunidades de influencia minera, es la que viene realizando en estos momentos el Proyecto Las Bambas (mina de cobre ubicada en las provincias de Cotabambas y Grau en la Región Apurímac). En el Corredor Minero Sur. Desarrollado por la empresa Minerals and Metals Group (MMG).

A partir de la ampliación de inversión, en el proyecto minero, de 2,000 millones de dólares, Las Bambas ha decidido empezar a promover con mayor fuerza su “Programa Corazón”, de responsabilidad social y relaciones comunitarias. Creado con el objetivo de estructurar un nuevo modelo de desarrollo de empresas comunales, que permita pasar del modelo transaccional cortoplacista a un modelo de desarrollo integral de largo plazo -según lo dio a conocer Dante Rodas, Gerente de Control de Proyectos de Desarrollo de Negocios de Las Bambas.

“Actualmente –-sostuvo Rodas- se implementa cinco proyectos, en el que están participando ocho empresas comunales, las cuales están brindando, servicios de movimientos de tierras, electromecánica y manejo de aguas” (Energiminas. 25 octubre 2024).

Por otra parte, Las Bambas ha firmado un Acuerdo por la Educación de Apurímac, con el Ejecutivo del Gobierno Central, a través del cual, se beneficiarán 23 mil estudiantes de las provincias de Cotabambas y Grau, y del Corredor vial Apurímac-Cusco. Plasmado a través de un “Convenio Marco de Cooperación Interinstitucional” entre el Ministerio de Educación y la empresa. Pacto social por la educación, como eje central del desarrollo educativo en el país.

En virtud de este acuerdo, Las Bambas invertirá 20 millones de soles en la reconstrucción y rehabilitación de colegios, así como en el acompañamiento y la capacitación educativa. Dando muestras de responsabilidad social con la comunidad y el cuidado del medio ambiente. (Energiminas. 8 nov. 2024).

Asimismo, Minera Las bambas, a través del Instituto Tecnológico Tecsup, ha logrado capacitar a 30 jóvenes de la comunidad de Pumamarca -como parte de un compromiso asumido en la Mesa de Diálogo, que instaló el Programa “Fortalecimiento de capacidades”-. Adiestrándolos como operadores en línea amarilla. Dándoles conocimientos básicos sobre el manejo y operación de maquinaria pesada. Como retroexcavadoras, cargador frontal y motoniveladora. Como una forma de calificación, que les permita incorporarse competitivamente, como fuerza laboral especializada, en las diferentes instituciones públicas y privadas.

Sin embargo, consideramos que hay, todavía, mucho por hacer, en favor de las comunidades en el Corredor Minero del Sur. Para poder mitigar los constantes conflictos sociales mineros, que se presentan en la zona. Una obra pendiente y de urgencia es el asfaltado de toda la vía, que les permite bajar los minerales hasta el puerto de Mataraní en Arequipa. Ya que el tránsito diario de cientos de vehículos pesados, levantan una polvareda que contamina el medio ambiente, afectando las vías respiratorias de las personas que viven en esos poblados.

Como podemos darnos cuenta, para avanzar a paso firme, en el desarrollo y crecimiento de la industria minera en el país, en imprescindible desarrollar buenas relaciones de responsabilidad social con las comunidades alto andinas, promoviendo el diálogo permanente y la gestión social. Asumiendo responsabilidad compartida en el cuidado del medio ambiente. Y compartiendo los beneficios económicos producto de la extracción de los recursos minerales que nos proveen nuestras hermosas cordilleras de Los Andes.

Creemos que tenemos mucho que hacer en ese sentido, para lograr el crecimiento económico que tanto necesitamos, para poder alcanzar el progreso y el bienestar para todos los ciudadanos, hombres y mujeres, que vivimos en este país. Bendecido con la abundancia de minerales en las entrañas de nuestras elevadas cumbres.

Aprovechemos, este momento histórico, de gran demanda y de precios altos del mercado internacional. No lo dejemos pasar, trabajando juntos, y unidos por construir un mejor país.

(*) Periodista

** Extracto de un capítulo del ensayo “La Industria Minera en el Perú”, que se encuentra en redacción y desarrollo.